De entrada nomás, el viernes por la noche la Peña Ricardo Bochini realizó el banderazo que ya es costumbre cuando Independiente visita tierras santafesinas.
Y corrían las 20 horas del viernes cuando el Hotel Riviera se tiñó de rojo al ritmo del Club Atlético Independiente.
Cientos de hinchas no tardaron en cortar la Calle San Lorenzo al 1400 en donde se ubica el Hotel Riviera, dispuesto por el plantel profesional para concentrar en vistas a lo que fue el empate frente a Newells.
El sábado, complicado para el tránsito, tuvo viajes de alrrededor de 7 horas para llegar a la cuna de la bandera. Si bien el corte de los camioneros de Moyano hizo que tanto micros como autos tuviesen que ir por la ruta que va camino a Pegamino, la ciudad también estaba muy transitada por el partido de las Leonas.
Pero Independiente siempre está en todos lados y más de 3 mil almas dijeron presente en un horario complicado y una cancha que no es precisamente para ir en familia.
Independiente tiene 2 puntos de 15 pero la gente, en las malas sigue diciendo presente.