Fue el sexto gol del delantero de Lanús ingresado desde el banco de los suplentes. “Ganá la espalda en velocidad”, le había marcado el entrenador grana cuando ingresó a los 30 minutos del segundo tiempo. Y así fue, en la primera clara que tuvo, la pelota le llegó por el hueco de la línea de 3 que tiró el offside -no fue posición adelantada- y definió ante un Hilario que nada pudo hacer.
Apenas 11 minutos le llevó al Tanque abrir el resultado. Y eso que era uno de los nueves que sonaba antes de que llegue Ernesto Farías. Con River ya había marcado el 1-0 a los 43 del segundo tiempo por el Clausura 2011. Luego, marcó con Lanús en el Apertura del año pasado a los 47 del complemento.
Así, el Rojo cortó una racha de 5 partidos sin perder en el Libertadores de América y ocupa el último puesto en la tabla de posiciones con dos derrotas en dos presentaciones.
