Independiente venció 1 a 0 a Argentinos Juniors en la Paternal y salió de la zona de descenso. El único gol del partido lo convirtió Julián Velázquez a los 21 minutos del segundo tiempo. En una cancha bastante complicada y muy resbaladiza, se consiguió un triunfo con gran sacrificio.
El equipo se encuentra en alza y se nota. Luego de no haber obtenido los tres puntos durante 19 fechas, se pudo festejar el triunfo por tercera vez consecutiva en el ámbito local, y cuarta contando el duelo de copa. Si bien el Rojo no tuvo el buen fútbol que se observó la jornada pasada ante Atlético Rafaela, logró seguir por el mismo sendero.
En el primer tiempo el partido se jugó mucho por el centro de la cancha, con un Argentinos que era escasamente superior, aunque, en ciertos lapsos, los de Avellaneda lograban amalgamarse y tener momentos de buen rendimiento. Así fue como Vargas tuvo la oportunidad de abrir el marcador en la jugada más clara de esta primera etapa. Ferreyra superó su marca por el lateral derecho y envió un centro dirigido a la puerta del área donde Farías, de cabeza, lo dejó en soledad para festejar lo que sería el uno a cero. Pero el colombiano luego de haberla acomodado con el pecho, remató desviado cerca del palo derecho de Ojeda.
En el complemento se vio una mejor faceta del equipo del Tolo Gallego. Ya con Villafáñez en el campo por el flojo Rosales y con Mancuello por Ferreyra, Independiente llegaría al gol en el minuto 21. El chubutense recuperó el balón sobre el lateral, y consiguió que le cometan una infracción que ejecutaría Mancuello. Con un centro de gran precisión, Julián Velázquez se adentró al corazón del área y de un testazo al piso, hizo inutil la intención de Ojeda por evitar el tanto. Así anotó su primer gol en su carrera por torneos locales, desatando la locura en la hinchada roja.
Luego del gol, Independiente entregó la pelota, se posicionó muy atrás y esperó a que el local buscará el empate para poder salir de contra. Sin poder ofensivo, los de Astrada no consiguieron el empate y la popular visitante se vestía de fiesta.
El Rojo, por ahora, se encuentra fuera de la zona de descenso. Continuando así se ve cada vez más posible ahuyentar a todos los fantasmas y alejarse de este presente que no refleja en lo más mínimo a un club de tanta grandeza como lo es Independiente.
