Finalmente se terminó la novela de Fabián Vargas y el jugador colombiano firmó con el Barcelona de Guayaquil por un año. En Avellaneda, mucho no lo van a extrañar.
Todo comenzó semanas atrás luego del descenso de Independiente y cuando se abrió el mercado de pases. El jugador primero dijo que iba a escuchar ofertas y que cuando estuviera definido su destino lo iba a comunicar. Le pidió al club que se ponga al día con el pago de la deuda que tenían con él y cuando hubo acuerdo con su representante y se pactaron los pagos, salió a la luz el interés de Estudiantes, Racing y Rosario Central.
Vargas salió a reclamar la deuda del club públicamente y comenzó a correr el rumor de que estaba cerca de Racing. Roberto Ayala, mánager de la “Academia” y Rodolfo Molina, vicepresidente, anunciaron que estaba todo muy avanzando con el jugador y a los pocos días, se dieron a conocer amenazas al volante y se aseveró que el pase se caía.
El colombiano inhibió a Independiente en Futbolistas Argentinos Agremiados junto con Ernesto Farías, reclamando que le paguen la deuda. Los medios daban por sentada su llegada a Rosario Central, pero todo se enfrió. La oferta económica de Ecuador siempre fue la mejor y terminó firmando con el Barcelona por un año de contrato.