Daniel Montenegro habló de todo y de todos. Ya inmerso en el nuevo mundo de la B Nacional, el “Rolfi” se defendió de las críticas que recibió por su rendimiento y aseguró que la mejora en su nivel se debió al buen funcionamiento de todo el equipo. También recordó el duro semestre que vivió por el descenso y remarcó la actitud de varios jugadores de quedarse en el plantel. Además, elogió a Omar De Felippe, Matías Pisano y Gabriel Milito.
“Se me criticaba que no estaba cerca de la jugada o que no participaba mucho. Tuvimos una charla con Omar y él es el que me prohibía estar cerca de la jugada para que yo tuviera más espacios”, reveló el Rolfi en diálogo con Líbero, por TyC Sports. Y remarcó: “Si las cosas van mal, me la aguanto, pero siempre estoy, eso es lo que nunca me voy a reprochar. Siempre estuve poniendo la cara en circunstancias buenas o malas. Nadie va a poder ratificar que alguna vez fingí una lesión”.
En tanto, el “10” explicó que su buen rendimiento se debe a la mejoría general del equipo, y lo comparó con anteriores etapas en el club: “Siempre caractericé a un jugador de fútbol, más allá de lo personal, por lo grupal. Me pasó que hice tres goles, que fui figura o que casi salí goleador y eso es por el grupo, por lo que se hace en equipo. El único que ganó los partidos solo fue Maradona, incluso a Leo (Messi) lo rodean monstruos. Si el equipo está bien, vamos a andar todos bien”.
Montenegro no se guardó los elogios hacia el entrenador del Rojo: “Suma mucho que conozca la categoría. Me ayudó un montonazo a mí y a los demás chicos. Conoce las canchas, muchos jugadores, maneras de actuar y de trabajar”. Además, afirmó que “el equipo viene en alza y él (De Felippe) todavía no está tranquilo, porque más allá de los buenos resultados es una persona exigente”. El Rolfi explicó que el plantel necesita “conocerlo más y encontrar una idea de juego que salga por naturaleza, porque esa regularidad es la que él quiere”. En la misma línea, confesó que no lo incomodan los reproches que hace el DT después cada encuentro: “No me molesta, porque antes nos lo dice a nosotros. Está bueno porque no hay nada que ocultar”.
En relación a los puntos altos del equipo, resaltó las cualidades de Matías Pisano, uno de los pilares en la B Nacional: “Se le metió mucha responsabilidad, tiene 20 años y caerle de esa manera no es fácil, pero tuvo las agallas y el atrevimiento de suplantar todo eso con picardía, velocidad y atrevimiento. Por eso e ganó tan rápido el cariño de la gente”.
Por otra parte, el “10” valoró la actitud de varios jugadores de quedarse en Independiente después del descenso. “Lo más fácil hubiese sido irnos y probar suerte en otro lugar, pero quisimos quedarnos y ponerle el pecho a esto, tener la posibilidad de cambiar ese sufrimiento en alegría”, recordó Montenegro, y resaltó que “es un acto de grandeza y madurez”. A su vez, aseguró que “no hubo que empujar a nadie” para seguir y le tiró una indirecta a quienes decidieron dejar el club: “Con mirarnos, te dabas cuenta quién podía quedarse y quién no, quién terminó jugando la mayoría de los partidos y quién no, quién estuvo siempre y quién no”.
En otro orden, Montenegro manifestó que no se arrepintió de regresar a Independiente: “No me equivoqué al elegir volver, más allá de que el resultado no haya sido el que yo o la gente quería. Yo quería ser una persona agradecida. Es la cuarta vez que estoy y no es fácil en el fútbol argentino que un club tan importante te abra las puertas tantas veces”.
Finalmente, se refirió al trabajo de Gabriel Milito como entrenador del Selectivo: “Me pone muy contento verlo tan metido y comprometido. Tiene el temperamento de siempre, esas ganas de que los chicos aprendan y viene con la escuela del Barcelona. Nos tocó hacer futbol con ellos y juega parecido. Nos volvía locos a nosotros como compañeros, ahora lo hace con los chicos, je. Esta base para él es muy importante, veo que disfruta”.
