Omar De Felippe estalló de bronca después del empate entre Independiente y Almirante Brown. El entrenador dejó a un lado la cautela y la serenidad que lo caracteriza y se quejó de los problemas que hay en el club, especialmente de las desprolijidades que llevaron al paro de empleados que puso en duda el comienzo del partido.
“A las cinco de la tarde no sabíamos si jugábamos. Hay que marcar la realidad de lo que está pasando, acá no nos podemos esconder. Yo puedo decir que jugamos bien o mal pero el entorno no es fácil”, expresó De Felippe en conferencia de prensa, y advirtió: “De una vez por todas hay que ponerse los pantalones y resolver las cosas, porque esto es un quilombo”.
El entrenador no ocultó su disgusto por la situación previa al partido y le tiró un mensaje a la dirigencia: “No sabemos si tenemos que poner las redes, si se cortaba el pasto, si jugamos, si no jugamos… ¡Ya está! ¿Qué carajo estamos esperando para juntarnos y para ver qué hacemos y adónde vamos?”. En la misma línea, puso al plantel al margen de los cuestionamientos: “Estoy caliente. No es fácil para nosotros tampoco. ¿Le voy a pegar a los jugadores? No, porque con estos jugadores tenemos que pelear el ascenso y vamos a rompernos el alma para hacerlo”.
Por otro lado, el DT remarcó que la situación general del club afecta el rendimiento del equipo: “El entorno es muy complicado, esto no es fácil. Creo que si no nos ponemos los pantalones largos, esto se va a complicar mucho”. Además, se refirió a los insultos de los hinchas al término del partido y volvió a defender a los jugadores: “Yo entiendo a todo el mundo. Entiendo a la gente que putea, entiendo todo. No estamos contentos por no haber ganado el partido de hoy. Los pibes hicieron lo que pudieron, es lo que hay y hay que mejorarlo”.
Sobre el desarrollo del partido, De Felippe reconoció que el equipo volvió a tener un nivel muy flojo y se lamentó por las ocasiones de gol desperdiciadas. “Creo que no jugamos bien. En los últimos 20 minutos tuvimos muchas posibilidades como para ganar el partido y erramos mucho. Ellos una vez que nos llegaron nos convirtieron. Es otra frustración más para nosotros pero hay que seguir”.
“El equipo no está jugando como uno pretende. Venimos mejorando pero no está alcanzado para ganar los partidos. Cuando hay una duda es un gol. Tampoco ligamos, o cometemos errores en la definición que son muy graves”, agregó el entrenador, y señaló que “hay tres o cuatro jugadores que no están en su nivel y en este equipo eso se siente mucho”.