Gabriel Milito rompió el silencio después de haber rechazado el ofrecimiento de los dirigentes de dirigir al equipo en Primera División. El Mariscal explicó cuáles fueron los motivos que lo llevaron a negarse a ser el DT y habló sobre algunos temas de actualidad. Además, recordó una anécdota del Apertura 2002.
“Hubo muchos motivos por los que no acepté dirigir. El principal es por el proyecto que tenemos, yo quiero privilegiar eso. Mi estadía en Primera iba a depender de los resultados y hubiese sido acelerar un proceso en el que estamos trabajando y en el que creemos”, expresó Milito en la fiesta por los 1500 programas de Campanas del Infierno. Sin embargo, enseguida deslizó: “Seguramente, por lo menos eso es lo que espero, el primer equipo que me toque dirigir en Primera va a ser Independiente”.
“La base de la construcción del club está en los juveniles, en los chicos. Yo estoy aferrado a ellos. Junto con Miguel Gomis coordinando las inferiores y Santiago Rodríguez, que ya sumó más de 150 niños a las infantiles, está la génesis de lo que, esperamos, sea el futuro de la institución. Así las cosas funcionan, cuando cada uno se ocupa de lo que sabe”, analizó el Mariscal en referencia al proyecto que tiene con los chicos del club.
Por otro lado, el Mariscal opinó sobre la dirigencia actual encabezada por Hugo Moyano: “Este presidente sabemos de dónde viene. Los anteriores no conocíamos quiénes eran”. En la misma línea, agregó: “Las últimas gestiones no han sido para nada buenas, pero hay que reconocer que no agarraron en las mejores condiciones. Cada nuevo proceso me genera ilusión, como a todos los hinchas, y ojalá hagan las cosas de la mejor manera”.
Finalmente, Milito recordó con nostalgia el campeonato de 2002, más precisamente el partido en la Doble Visera que empujó a Independiente hacia el título. “Tengo la foto guardada en mi cabeza del momento en el que (Lucas) Pusineri mete aquel gol tan famoso ante Boca. Cuando me di vuelta hacia nuestro arco y vi toda nuestra gente festejando de esa manera, fue algo que no me voy a olvidar nunca. Me lo voy a llevar a la tumba”, concluyó.
