Claudio Morel Rodríguez, ex jugador de Independiente que participó del descenso y de la vuelta a Primera, habló de su paso por el club y de la dificultad de jugar en la segunda categoría. Asimismo, se tomó un tiempo para opinar sobre la conflictiva salida de Federico Insúa y sobre la situación de Daniel Montenegro, con quienes compartió plantel.
“El Pocho y el Rolfi son jugadores que le dieron mucho al club y me parece que, de irse, se tendrían que ir bien”, consideró el defensor en diálogo con Ascenso Sport. En la misma línea, explicó que “el club también les dio mucho a ellos, pero es importante que se vayan por la puerta grande”, pero aclaró: “También hay que estar ahí adentro y convivir ahí para opinar un poquito más”.
A la hora de recordar la experiencia de jugar en la B Nacional, Morel remarcó que “es un torneo muy competitivo y muy duro donde hay que mantenerse fuerte”, y confesó que al Rojo le costó sobreponerse a esa presión: “Nosotros también lo sufrimos, a tal punto que tuvimos que ir a un partido final con Huracán. A Independiente todos los equipos le querían ganar, se hizo muy complicado”.
“Nos costaba asimilar el hecho de estar en la segunda división. Nos costaba mucho hacer el duelo de lo que había pasado y muchos equipos nos hicieron partido y nos complicaron bastante”, manifestó el lateral izquierdo, quien confesó que prefirió quedarse en club después del descenso para pelear la vuelta a Primera: “A mí me gustan los desafíos y me tocó vivir el tema del descenso, entonces quise quedarme en el club para lograr el ascenso”.
Finalmente, Morel no se guardó los elogios para Omar De Felippe, el entrenador que comandó a Independiente a volver a la máxima categoría: “Por cómo agarro al equipo y cómo respondió después adentro de la cancha, yo pensaba que iba a seguir dirigiendo. Sabe llegarle al jugador con un mensaje claro, es directo y frontal, por eso le fue bien en distintos equipos”, cerró.