Tras el muy buen partido de Independiente en Rosario, llegó Sarmiento de Junín a Avellaneda por la segunda fecha y el rendimiento fue una decepción para toda la gente que llenó el Libertadores de América. El mismo Jorge Almirón sabía de antemano que, aunque elija parar el mismo equipo, no iba a poder jugar atrasado y a la espera de ataques rápidos como lo hizo ante Newell’s y que estaba obligado a salir a buscar el encuentro. Sin embargo, salvo por pocos lapsos del partido, el local no salió a pasar por encima al visitante. Hizo todo lo contrario: fue pasivo, mostró muy poca rebeldía y las pocas distracciones atrás costaron un gol.
Los mejores minutos de Independiente fueron los primeros 20. Sin ser una luz, tomó la iniciativa y preocupó a Sarmiento, principalmente por la actuación de Matías Pisano, uno de los pocos rescatables en el empate. ¿La imagen repetida en gran parte de la tarde? El Rojo en campo rival, pero con pocas ideas para entrar. El planteo de Sergio Lippi fue casi idéntico al de Almirón en Rosario.
La espera del equipo de Junín obligaba a Independiente a jugar con muchos menos espacios que ante Newell’s y se sintió. Lucas Albertengo, de tan buena tarea en la primera fecha jugando con el arco de frente, casi siempre debió hacerlo de espaldas. Si bien tuvo un cabezazo que se estrelló en el palo, no redondeó un buen partido y le costó mucho generar peligro en espacios reducidos.
Otro punto que dejó en evidencia la excesiva paciencia -ser paciente es una virtud cuando en un determinado momento de la jugada se cambia el ritmo- y la pasividad del equipo, fue el casi eterno toqueteo entre los cuatro jugadores de la defensa. Del 3 al 6, del 6 al 2, del 2 al 4 y viceversa. Además, Papa -de partido correcto- casi siempre estaba libre en su sector, pero a la hora de desequilibrar por la punta izquierda, el peligro se diluía. Y es entendible, Papa no es un volante ofensivo, y eso es responsabilidad del entrenador.
Y el Verde, cuando tenía la posibilidad de avanzar unos metros, generaba fallas importantes en defensa. Hubo una sola llegada clara del visitante en el primer tiempo. Tras un pase en cortada entre Toledo y Figal, Gervasio Núñez estuvo a punto de convertir, pero su puntería erró por centímetros.
El segundo tiempo tuvo un arranque parecido al primero, aunque la leve superioridad del Rojo duró menos minutos. De todas formas, el abanderado en el desequilibrio era el mismo: Pisano. Flotando por el medio lastimaba a la defensa rival.
Cuando el encuentro ingresó en el último tercio, Sarmiento, al ver que a Independiente le costaba romper las líneas, se animó y comenzó a adelantarse. La presión que hacían todos sus jugadores en campo propio, pasó unos metros más arriba. Y el partido se tornó de ida y vuelta con aproximaciones peligrosas de ambos lados.
El ingreso de Martín Benítez -el mejor del local junto a Pisano- por Papa le dio mucho más picante al equipo por la banda izquierda. Fue de los pocos jugadores que rompía las líneas de presión del equipo de Lippi y generaba peligro. Y hubo una situación del segundo tiempo que otra vez dejó a las claras la pasividad local. Benítez gambeteaba e intentaba buscar un pase en ofensiva, sin embargo, sus compañeros estaban estáticos ante las marcas.
Y cuando faltaban seis minutos para el final, llegó el baldazo de agua fría. Sarmiento, que había llegado una vez de forma clara en la primera parte y había inquietado con dos disparos de afuera de Núñez, convirtió el primer gol de la tarde. Pisano y Toledo miraron al lanzador y Cuevas, autor del tanto, cabeceó con total tranquilidad ante la mirada de Cuesta y Tagliafico.
Algunos piensan que también hubo un error del arquero. Creo que por la fuerza y la comba abierta del centro, si Rodríguez salía a cortar, quedaba a mitad de camino. Si es que tiene responsabilidad alguna, es mínima en comparación a la desatención en defensa.
Cuando parecía que estaba todo perdido, la suerte le dio un guiño al Rojo. En tiempo adicionado, Valencia, de flojo ingreso, remató al arco pifiado y Pisano, muy atento a la jugada, la jugó de taco y empató el partido tras el rebote. Premio para él por intentar algo distinto durante todo el encuentro.
Federico Beligoy, que tuvo un mal partido -sin ser determinante para nada en el resultado-, dio el pitazo final y se concretó el empate 1-1. Salvo las buenas actuaciones de Benítez y Pisano, el resto de los jugadores de campo no completó un buen encuentro. La defensa, las pocas veces que fue atacada, sufrió de más. Figal regaló en reiteradas ocasiones la pelota al mediocampo rival en las salidas. El uruguayo Rodríguez jugó un muy buen primer tiempo, pero se hizo amonestar infantilmente y debió afrontar un segundo tiempo solo en la recuperación y condicionado. Mancuello tuvo uno de sus peores partidos en Independiente de los últimos dos años y el equipo lo sintió mucho. Quedó en evidencia que Papa puede ser volante ofensivo cuando la idea es contragolpear, pero si hay que tomar la iniciativa, le cuesta esa posición. Albertengo no pudo desequilibrar ante pocos espacios y Lucero estuvo desaparecido en acción de forma literal. Si bien el ping pong terminó 7-5 a favor del Rojo -con pocas claras de ambas partes-, no se puede dejar de lado que el presupuesto de Sarmiento es de casi $2.000.000 y que Independiente gastó cerca de $90.000.000 en refuerzos.
El próximo rival será Quilmes, que probablemente, aunque sea local, haga un planteo similar al de Sarmiento en Avellaneda. Jorge Almirón tendrá la tarea de encontrar la forma de lastimar y romper con eso, y los jugadores deberán mostrar una intensidad y una rebeldía parecida a la que hubo en Rosario y completamente distinta a la de ayer.
Como siempre impecable el análisis! ¿No era que iba a haber una sección del análisis dedicada a los arbitrajes? Esta semana había mucha tela para cortar respecto al arbitraje de Beligoy, si bien no tuvo ningún error determinante, que se equivocara tanto en contra del Rojo y a favor de Sarmiento genera un desgaste significativo.
A el rojo lo vi, lento, sin creatividad, pasivo, me cuesta admitirlo, con miedo a perder y creo que por esto casi perdemos. Dividimos la pelota en lugar de tenerla. Delanteroas que juegan de espaldas. Tagliafico y Toledo, buenos defensores, no tienen altura y por arriba les van a ganar siempre, Figal es pura inexperiencia y lo banco, pero ya es hora de que deje de regalar la pelota, Cuesta es bueno pero lo lento. El Ruso tien que salir a cortar los centros, le guste o no, no puede depender de sus buenos reflejos y el medio…. trajimos a Papa para quemarlo de volante????? Y cuando esten bien Pizzii o Mendez que hacemos con Papa????? Si se necesita pivotear a lo basqueboilusta, no es mejor que lo haga Lucero que esta acostumbrado a que lo raspen y a la pelea y dejar a Albertengo o Riaño de frente al arco que no saben que hacer de espaldas al arco??? Almirón, hizo el curso de técnico o se lo estamos pagando??? Por mucho, mucho menos que esto a DE Felippe lo hemos puteado de lo lindo. Estoy cansado de aplaudir empates heróicos, estoy cansado de que el equipo entre al LDA y le tiemblen las rodillas cuando a los que les tiene que temblar es a los que lo visitan.
El gol no es culpa del arquero, sino de los defensores que duermen en el centro y si lo fuera, es algo que hay que trabajar en la semana, cosa que el entrenador de arqueros no hace. Y la figura fue claramente Pisano.
El análisis post partido, me parece correcto. Lástima que el que está encargado de hacer lo mismo pero antes del partido, duerme la siesta con Benítez (si no, no se explica por qué siempre es primera opción para ingresar).
Justamente, la gambeta es lo que desequilibra a las defensas cerradas como la de Sarmiento que hizo un planteo más que correcto y cuando vio que el Rojo no lastimaba se animó. Como siempre, lo pagamos carísimo (como algunos refuerzos).
Yo no encuentro nada para destacar. Si hablamos que el muerto de Benitez fue el mejor del partido es porque estamos en serios y graves problemas. En la nota dice que gastamos 90 millones en refuerzos casi y la figura es un pibe que se duerme en la cama y le garchan a la novia en la cara.
El informe muy bueno, no comparto en varias cosas, como la del gol. Es culpa del arquero, hasta el que vendia cocas se dio cuenta que lo unico que podia hacer sarmiento en esa jugada era meterla al area. Y no comparto para nada que Pisano sea la figura. Hizo el gol y cuando jugo 5 minutos por donde tiene que jugar, en el medio, en cada tiempo desequilibro. Pero prefiere rascarse la chota en la linea, recriminarle cosas a los lineas, a sus compañeros y hablar con el dt. Urgente Riaño adentro y Lucero afuera.
Muy buen análisis. Está mas que claro que el planteo fue errado. Nunca le encontró la vuelta al partido y es verdad, muchos equipos nos van a jugar así. Almirón, ponete a trabajar en serio o da un paso al costado!!!!!
Estos tipos de partidos se pueden abrir con la pelota parada, con un buen ejecutante de tiro libres como lo hacía Riquelme en boca. El técnico tiene que saber cuales son las alternativas para abrir este tipo de partidos, para eso le pagan y mucho.
Lo primero a mejorar es que no nos conviertan primero, como lo hacen todos los equipos.
Almiron, date cuenta que Papa no puede jugar ahi por dios, sacalo de una vez loco, no te das cuenta que no puede atacar
Excelente Rodrigo, Almiron y el equipo nunca supieron entrarle a ellos que se defendieron bien y me preocupa como vamos a hacer con tantos equipos que nos van a jugar asi.