Diego Rodríguez (6): No salió a cortar a un centro y la jugada terminó en gol de Burdisso, que le cabeceó en el área chica. A pesar de ese error, intervino bien las pocas veces que lo exigieron. En el final le tapó un mano a mano a Meli y salvó al Rojo de la derrota.
Néstor Breitenbruch (5): Recuperó la titularidad y tuvo que marcar nada menos que a Chávez. Por momentos lo pudo controlar y en otros le costó. No se destacó pero no tuvo una mala noche.
Mauricio Victorino (3): Perdió fácil de arriba con Burdisso en el empate de Boca. Antes, tuvo una pifia grosera que de milagro no terminó en gol. Llegó varias veces a destiempo. Tuvo buenos cruces y anticipos, pero en general no cerró un buen partido.
Emanuel Aguilera (5): Otro que volvió a la titularidad después de varias fechas. Alternó buenas y malas, aunque se mostró más firme que su compañero de zaga. Algunas veces abusó del pelotazo.
Nicolás Tagliafico (3): Tuvo un comienzo bastante prolijo, pero de a poco se convirtió en una máquina de cometer errores en defensa. Las veces que se proyectó en ataque resolvió siempre mal.
Jesús Méndez (8): Estaba afuera de la lista de concentrados por lesión, se recuperó a último momento y terminó siendo el mejor de la cancha. Marcó sin abusar de las faltas, anticipó, distribuyó, comandó varias contras y fue el eje del equipo en gran parte del encuentro, jugando y haciendo jugar. Sobre el final no pudo darle dirección a un remate que habría significado el triunfo.
Federico Mancuello (4): Cuando tiene un mal partido, el equipo lo siente. Y hoy pasó exactamente eso. Al capitán le costó entrar en el circuito de juego y no encontró ni fabricó los espacios para lastimar al rival. Buscó varias veces el gol olímpico, sin puntería. Se fue expulsado de manera insólita, por dos amonestaciones que eran evitables.
Matías Pisano (6): Fue clave de tres cuartos de cancha hacia adelante, desequilibrando y mostrando la rebeldía que el equipo necesitaba. Buena asistencia a Albertengo para el 1-0 de Independiente. Si bien por momentos se apagó, mostró actitud y redondeó una buena noche.
Francisco Pizzini (3): Flojísimo. En la semana dijo que los jugadores debían “sacar un plus” para ganar los clásicos, algo que él no hizo en ningún momento del partido. Poca confianza para encarar y desequilibrar. Prácticamente no pesó por su sector.
Martín Benítez (5): Mostró mucha voluntad y actitud en el clásico, corriendo y buscando espacios, pero cuando tuvo la pelota le faltó claridad casi siempre. Trató de juntarse con Pisano y Albertengo y pocas veces lo logró.
Lucas Albertengo (7): El sacrificio y el desgaste de siempre. Buen cabezazo para vencer a Sara y abrir rápido el marcador. Se las ingenió para generar situaciones él solo y tuvo mucha picardía para ganar córners y tiros libres. Le falta un acompañante en los últimos metros.
Juan Martín Lucero (2): Entró por Pizzini en el segundo tiempo y no aportó absolutamente nada. Es difícil de soportar la displicencia que muestra en cada partido.
Franco Bellocq (-): Ingresó en el final del partido para ocupar el hueco que quedó por la expulsión de Mancuello.
COINCIDO CON QUE PIZZINI Y BENITES N O PUEDEN JUGAR MÁS, NO JUGARÍAN EN NINGÚN OTRO EQUIPO.
EL ARQUERO ES EL PEOR ARQUERO DE PRIMERA DIVISIÓN. MANCUELLO CREO QUE SE DURMIÓ EN LOS LAURELES, NO TERMINA UNA BIEN Y PARA COLMO SE MANDÓ SEMEJANTE MOCO. Y LO DE LUCERO NO TIENE NOMBRE: JAMÁS HIZO ABSOLUTAMENTE NADA EN LA CANCHA. NUNCA VI ALGO IGUAL.
Ser tan duro con Mancuello no es justo, no me parece q’ haya jugado mal, no coincido con la calificación.
Rodríguez es el peor arquero de los últimos 10 años, por lo menos. Encima, vigilante. Manda en cana a los defensores cuando ble.no sale. Las que tapa, las slava de puro ojete. Es horrible.
6 puntos el ruso rodriguez, tiene menos centro que marmol…
PIZZINI Y BENITEZ NO PUEDEN JUGAR MAS EN INDEPENDIENTE, SON 2 PECHOS FRIOS, NO TRABAN, NO LUCHAN, NO SE MUESTRAN COMO OPCION Y PATEAN COMO UN NENE DE 5 AÑOS, LES DIERON COMO 100 OPORTUNIDADES Y CADA VEZ JUEGAN PEOR. PARRAFO APARTE PARA EL ARQUERO, NO SALE NUNCA. YA ES HORA DE PONER A MONTOYA.