Ezequiel Vidal no pudo completar ni siquiera el primer tiempo en Misiones. En su mejor momento, el delantero debió salir del campo de juego y fue reemplazado por Juan Martín Lucero. Según el cuerpo médico, sólo se trató de un calambre.
El juvenil tuvo un gran partido a pesar de haber jugado pocos minutos. De una gran jugada suya vino el primer gol: encabezó un contraataque, soportó la marca y habilitó a Diego Vera para el 1-0. Sin embargo, a los 40′ y casi de sorpresa, se tiró al piso, pidió el cambio y se fue llorando en una camilla.
La situación preocupó a más de uno, pero tanto los médicos como el propio Mauricio Pellegrino revelaron que Vidal sufrió apenas un calambre y que la decisión de sacarlo del partido fue por precaución. Así las cosas, estará disponible para enfrentar a Independiente Santa Fe el próximo jueves.