Tras la derrota 2-0 ante Rosario Central en el Libertadores de América, los jugadores optaron por retirarse sin emitir declaraciones frente a la prensa. Sin dar explicaciones, se subieron al micro y se marcharon de regreso al hotel.
Sin fuerzas o sin ganas de enfrentar a los periodistas, el plantel entero decidió quedarse callado y retirarse del estadio, dejando nada más que las palabras de Mauricio Pellegrino para explicar por qué Independiente jugó tan mal.
El plantel está citado para volver a las prácticas el jueves por la mañana en Villa Domínico, donde comenzarán a entrenar para levantar la cara y mostrar mejorías en el clásico del domingo, contra Racing, a las 19:15.