Independiente le ganó 2-1 a Defensa y Justicia en Florencio Varela y se metió en zona de Copa Libertadores. Alexander Barboza puso en ventaja al local y el Rojo lo dio vuelta con dos golazos de Nery Domínguez y Juan Sánchez Miño.
No fue uno de los mejores partidos del Rojo en el campeonato. Lo ganó con más carácter y sacrificio que fútbol, luchando contra lesiones, fallos arbitrales en contra y un Halcón que siempre intentó ser prolijo con la pelota.
El dominio empezó siendo del local, que con más tenencia y profundidad dejaba en claro su propuesta agresiva. Sin embargo llegó al gol de la manera menos pensada: a los 22 minutos, una serie de rebotes le dejó la pelota servida a Barboza, quien cayéndose al suelo conectó para dejar sin reacción a Martín Campaña.
El trámite hacía prever que el partido se haría muy cuesta arriba, pero el equipo de Ariel Holan reaccionó enseguida. Dos minutos más tarde del tanto de Barboza, Emiliano Rigoni desbordó por izquierda y la pelota le cayó a Domínguez, quien sacó un violento derechazo para estampar el 1-1. Desde ahí y hasta el final del primer tiempo se vio lo mejor de Independiente, que pudo darlo vuelta pero no estuvo preciso para definir.
Ya en el complemento, Defensa adelantó sus líneas y empezó a acorralar a un Rojo que ya había gastado un cambio por la lesión de Maximiliano Meza (un patadón que debió ser penal). La solidez defensiva, solventada en gran parte por la garra de Nicolás Tagliafico -recién llegado tras 21 horas de vuelo-y la seguridad de Campaña, mantuvo a Independiente con vida ante los avances del dueño de casa.
De a poco y ya con Walter Erviti en cancha, el equipo de Holan se empezó a animar con más coraje que prolijidad. Y fue a los 33′ que tuvo su premio con una notable subida de Tagliafico, un pase magistral de Ezequiel Barco y una exquisita definición de Sánchez Miño por encima del arquero.
Los minutos finales fueron de ida y vuelta. Pudo liquidarlo el Rojo y pudo igualarlo el Halcón, pero ninguno estuvo fino. Tras cinco minutos de adición, Penel, de flojo arbitraje, marcó el final y sentenció la enorme victoria de Independiente para quedar a un paso del objetivo. Alcanzó a Newell’s en el último puesto de clasificación a la Libertadores.
Haber si los Moyano dicen algo de los árbitros, que nos vienen robando desde hace rato, aunque venimos ganando igual, salvó con Boca. Dirigiendonos asi y con un poco de mala suerte para embocarla, nos fuimos a la B ! Espero que pongan los huevos que tengan que poner !