Independiente perdió 2-0 en el Libertadores de América frente a Atlético Tucumán por la Superliga. Maximiliano Meza dejó la cancha sobre el final del primer tiempo y el Rojo se derrumbó. En el complemento, el equipo tucumano marcó los dos tantos por errores defensivos y los de Holan no generaron nada en ofensiva.
En el arranque del partido, ambos equipos trataron de imponer su juego y tuvieron chances de gol, aunque con el correr de los minutos Independiente empezó a llevarse por delante al conjunto visitante. La mejor manera de incomodar al rival fue con la pelota parada, aunque una vez más la efectividad no apareció.
Si bien el equipo no sufrió sobresaltos a la hora de defender, le costó mucho la generación de juego a partir de tres cuartos de cancha. El único revulsivo y que aportaba claridad era Maxi Meza, que para colmo se lesionó y tuvo que ser reemplazado. Desde su salida, crear situaciones claras de gol fue una odisea.
Ya en el segundo tiempo el encuentro se hizo muy cuesta arriba para Independiente: sin ideas, con un juego previsible y un notable cansancio, Atlético Tucumán aprovechó las que tuvo y no perdonó. A los nueve minutos, la Pulga Rodríguez envió un centro al segundo palo que encontró solo a Guillermo Acosta, que tuvo que empujarla para el 1-0 ante la mirada de Figal y Sánchez Miño, cómplices del error defensivo.
Con la desventaja en el marcador, Holan intentó cambiar el encuentro con los ingresos de Martín Benítez y Leandro Fernández, aunque no aportaron demasiado en el pésimo funcionamiento. Y si bien el equipo de Zielinski se quedó con diez a poco del final por la expulsión de Aliendro, otro error del lateral izquierdo del Rojo le dio la chance a Acosta de decretar el 2-0 definitivo.