Martín Campaña (6): Se lució tapando muchísimas pelotas complicadas y evitó una goleada. En el primer gol hubo más responsabilidad de la defensa que suya. En el 2-1 tal vez pudo haber hecho algo más. En el tercero, si bien el remate de Gabriel Hauche fue muy potente, su respuesta fue bastante floja.
Fabricio Bustos (4): En el tiempo que estuvo en cancha la pasó bastante mal con Hauche. Flojo en la marca y poco aporte en ataque. Se lesionó por un mal movimiento en la jugada del 1-1 y dejó la cancha envuelto en llantos.
Nicolás Figal (4): Si bien no tuvo responsabilidad directa en ningún gol, le costó horrores controlar a los delanteros de Argentinos y tuvo varios errores de cálculo por abajo y por arriba. Mucha presencia en ataque, pero no completó un buen partido.
Emanuel Brítez (3): Muy mala noche. Otra vez se confió, perdió la pelota y terminó en gol. De un error suyo vino el empate del Bicho y más tarde falló en la marca en la jugada del 2-1. Cabeceó mal en la única que tuvo en ataque.
Juan Sánchez Miño (5): Sin brillar, fue el más correcto de la defensa. Alternó buenas y malas. Lo desbordaron mucho por izquierda pero también aportó la salida más limpia desde el fondo. Pasó al ataque con criterio, sin descuidar su sector.
Pablo Pérez (6): Otra vez fue muy oportunista para quedar mano a mano con el arquero y, aunque definió mal en primera instancia, tuvo revancha y fusiló a Lucas Chaves. En el segundo tiempo estuvo más impreciso, pero fue el más claro en el peor momento del equipo.
Nicolás Domingo (4): Flojo partido. Muchas malas entregas, algo poco habitual en él. No terminó de hacer pie en el mediocampo. Perdió de vista a Hauche y llegó tarde a cerrar en la jugada del 3-1.
Pablo Hernández (3): Intrascendente. Esta vez no llegó al área rival como en los últimos partidos y tampoco encontró su lugar en el medio.
Martín Benítez (3): Arrancó enchufado pero nunca fue un peligro para la defensa del Bicho. No logró desequilibrar en toda la noche. Salió en el inicio del complemento.
Silvio Romero (4): De mayor a menor. Resolvió muy bien tras el primer remate de Pablo Pérez y se la dejó servida para el 1-0. Si bien se lo vio bien físicamente, sumó varias malas. Erró un mano a mano clarísimo que hubiese sido el 2-0, se perdió el 2-2 con una pésima definición y perdió la pelota que derivó en el 3-1.
Cecilio Domínguez (5): Floja actuación del paraguayo, casi siempre haciendo una de más y poco claro para asociarse con sus compañeros. En el final metió un gol que puede ser fundamental para pasar de ronda en Avellaneda.
Alan Franco (4): Entró a los 44 minutos por la lesión de Bustos. Estuvo lejos de brindar seguridad. Perdió la marca de Claudio Spinelli en el 2-1.
Francisco Pizzini (5): Reemplazó a Benítez y, con poco, lo suyo fue más productivo que el misionero. Le metió un centro preciso a Cecilio para el descuento sobre el final.
Fernando Gaibor (-): Pocos minutos para ser calificado. Entró por Hernández y mostró más ganas que juego.
Para mi Campaña 8, Bustos 3, Figal 3, Britez 3, Sánchez Miño 6, Pérez 6, Domingo 4, Hernández 3, Benítez 3, Romero 3, Domínguez 4. Pizzini 4, Gaibor 4, Franco 3. Merecimos perder por goleada y evidentemente no tenemos plantel. No sé puede jugar sin 9. Es evidente el espacio vacío que dejó el Torito Rodríguez cuando se fue porque él disimulaba los horrores defensivos cubriendo las espaldas de todos. Hauche nos tiene alquilados. Con estos jugadores no se puede jugar a lo que pretende el técnico. Ya sabemos que clavo compramos con Gaibor y Romero (10 palos los dos) pero Domínguez ¿vale 6 millones? ¿Menéndez 3 millones? Si en las inferiores no podemos fabricar jugadores mejores que estos, más vale no gastar plata ahí, cerremos todo y listo. Lo de las inferiores es el verso de todos los clubes grandes. Así pasemos de ronda, que urgente llegue junio y ver primero si seguir con este técnico y luego mirar el plantel para buscar un entrenador acorde a los jugadores que supimos conseguir o en su defecto, limpieza general, de la que se salvan 3, 4 jugadores de todo el plantel. Así estamos.
Bastante bien los puntajes, aunque Romero y Pizzini merecieron menos.