Los números de 2019: los refuerzos no rindieron

Tanto en el mercado de comienzo de año (con Ariel Holan como DT), como en el de la mitad de la temporada (con Sebastián Beccacece), Independiente desembolsó una enorme suma de dinero por jugadores que prometían mucho más de lo que terminaron demostrando en el campo de juego. Aquí, un detalle de cada uno.

En el primer receso, el Rojo tuvo varias bajas que dejaron dinero en las arcas del club, siendo las más importantes las de Maximiliano Meza al Monterrey (15 millones de dólares) y la de Emmanuel Gigliotti (hasta entonces goleador del torneo) al Toluca (3 millones de dólares). En sus lugares se incorporaron:

• Cecilio Domínguez (24 años) – 6 millones de dólares por el 70% del pase: proveniente del América de México, el paraguayo llegaba como una joven promesa, siendo un extremo hábil y encarador con llegada al gol, que lo convirtió en la compra más cara de la historia de la institución. Su paso fue de mayor a menor, sin llegar a concretar lo que se esperaba de él. En total disputó 32 encuentros y convirtió 8 goles.
• Pablo Pérez (33 años) – 1 millón de dólares por la totalidad del pase: el mediocampista llegaba de ser capitán de nada más y nada menos que de un Boca que venía de jugar la final de la Copa Libertadores. Por el lado del juego, el volante tuvo buenos momentos, siendo el encargado de la distribución del equipo, aunque de manera inconstante. En vez de aportar experiencia y voz de mando, se destacó por problemas extra futbolísticos y amonestaciones. 33 partidos, 4 goles, 16 amarillas y una expulsión.

A mitad de 2019, ya con Beccacece al mando, el Rojo se desprendió de jugadores que no le dejaron dinero al club (solo los préstamos de Fernando Gaibor al Al-Wasl y Gonzalo Verón a Aldosivi y la venta de Damián Martínez a Unión) y compró por una enorme cantidad de dinero.

• Lucas Romero (25 años) – 4.6 millones de dólares por la totalidad del pase: el DT insistió por él como pieza fundamental en el mediocampo, ya que Nicolás Domingo no era de su gusto futbolístico. El volante surgido en Vélez venía siendo uno de los mejores jugadores del Cruzeiro y se destacó en la llave contra River en la última edición de la Libertadores, pero desde que llegó al Rey de Copas tuvo varios altibajos, no pudo acomodarse y marcar su presencia, teniendo errores infantiles como contra Estudiantes. 15 juegos y 2 amarillas para Romero.
• Alexander Barboza (24 años) – 3.7 millones de dólares por el 82.5% del pase: otro de los pedidos por el técnico para reforzar la zaga central, conocido de su paso por Defensa y Justicia. Luego de una larga negociación con River, el defensor llegaba para aportar firmeza con su físico y estatura, pero, sin confianza, se mostró poco dúctil con la pelota y cometió errores que causaron que, tras unos pocos partidos, la hinchada lo silbara. Apenas 7 encuentros y 4 amonestaciones para Alexander.
• Andrés Roa (26 años) – 2.5 millones de dólares por el 80% del pase: el enganche colombiano, de buen paso por Huracán y perteneciente a Deportivo Cali, llegaba para demostrar todo su talento. Sin embargo, con poca continuidad y con una injusta expulsión en su debut como titular, todavía no pudo mostrar nada de por lo que se lo trajo. 8 cotejos y ningún gol para el volante ofensivo.
• Sebastián Palacios (27 años) – 2.4 millones de dólares por el 50% del pase: el interesante extremo había tenido un buen semestre con Talleres y, dado su buen paso por un club con el peso de Boca anteriormente, daba para esperanzarse. Comenzó de gran forma, convirtiendo ante Defensa y Justicia en su debut, pero su nivel empezó a caer hasta perder la titularidad y dejó de gravitar. 17 partidos y 2 goles para el tucumano.
• Cristian Chávez (32 años) – 2 millones de dólares por el pase: el centrodelantero venía de un buen semestre, anotando varios goles en Aldosivi, aunque parecía no valer lo que se pagó teniendo en cuenta su edad y valor de reventa. También con poca continuidad y tocado por las lesiones, jugó muy poco y ese poco lo hizo pobremente. 10 encuentros y ningún gol para el surgido en San Lorenzo.
• Domingo Blanco (24 años) – fin de préstamo: otro de los conocidos por el DT en Defensa y Justicia. Volvía de un préstamo, por lo que el Rojo recuperaba a un jugador que se mostró en alto nivel en el Halcón y que había sido convocado a la Selección Argentina. Jugando mayormente como extremo derecho en vez de interno por ese sector, como lo hacía en su anterior equipo, demostró su velocidad y habilidad para encarar y desbordar, aunque se fue hundiendo en la mediocridad general y fue de mayor a menor. 18 partidos y un gol, ante Patronato, que valió el pase a la siguiente instancia de la Copa Argentina.
• Gastón Togni (22 años) – fin de préstamo: al igual que Blanco, ya había vuelto al club hace tiempo, desde que sufrió la rotura de ligamentos cruzados en Defensa y Justicia. Previo a eso, venía con un gran nivel jugando como extremo por izquierda. Apenas 2 encuentros y 77 minutos alcanzó a disputar el surgido en la cantera del club.

Un año ampliamente negativo en cuanto al mercado de pases, invirtiendo una enorme suma de dinero por jugadores que no rindieron y perdieron su valor y sin concretar ventas de calibre. Sin rumbo, la situación pide a gritos una Secretaría Técnica o, al menos, alguna persona especializada y formada que pueda hacerse cargo de ese Departamento y tomar buenas decisiones.