Independiente perdió 1-0 ante Racing en el Cilindro, de una manera muy vergonzosa. En LocoXelRojo analizamos las claves de la derrota en el Clásico de Avellaneda:
- Falta de personalidad: el Rojo nunca pudo superar a la Academia en actitud, ni estando 11 contra 11, ni 11 contra 9. En todo momento se sintieron menos que el rival. Después de las dos expulsiones, al equipo le pesó la responsabilidad de ir a ganar el partido.
- Falla en la definición: Independiente llegó muy pocas veces al arco y no pudo definir las situaciones que tuvo. Algunas, por la gran tarea del arquero Javier García, que le tapó un remate a Juan Sánchez Miño y un cabezazo a Alan Franco. Más tarde, Leandro Fernández tuvo un mano a mano clarísimo y definió muy mal, en una situación que pudo haber cambiado la historia.
- El escándalo del final: después del gol de Racing, a los jugadores se les salió la cadena. De golpe apareció la personalidad que no habían tenido jugando al fútbol. Primero, Cecilio Domínguez se fue a las manos con Javier García y vio la roja. Y sobre la hora, Lucas Romero entró en el juego de Darío Cvitanich y se llevó una infantil expulsión.
- Malos cambios: si bien es uno de los menos culpables, Lucas Pusineri también tuvo responsabilidad por el mensaje que dio desde el banco. Respetó demasiado a un rival que sólo tenía armas para defenderse. En lugar de buscar el triunfo con jugadores desequilibrantes, cuidó a Sánchez Miño de la segunda amarilla, hizo debutar a un juvenil y mantuvo en el campo de juego a jugadores intrascendentes en ataque.
- Gol no válido: Patricio Loustau no vio que Cvitanich había tocado la pelota con la mano antes de meter el pase gol para Marcelo Díaz. Si bien no sirve como excusa porque eran 11 contra 9, es cierto que el gol debió ser anulado.
- Múltiples errores en la marca: parecía imposible que nueve jugadores llegaran al área del Rojo de una manera tan clara. Fue posible gracias a una grosera falla en la marca de los ¡cinco futbolistas! que estaban defendiendo: Lucas Romero, Thomás Ortega, Sergio Barreto, Alan Franco y Braian Romero.