Independiente perdió 1-0 ante Racing en el Cilindro en una nueva edición del clásico de Avellaneda, por la novena jornada de la Copa de la Liga Profesional, con un bochornoso penal sobre le final del partido. En LocoXelRojo analizamos las claves de la derrota.
- Múltiples ausencias: sin ser excusa, la gran cantidad de bajas por el brote de COVID-19 son un factor importante a la hora de analizar el encuentro y el Rojo lo sufrió con bajas en el once titular y, sobre todo, a la hora de los cambios, donde solo podía apelar a chicos que tenían un puñado de partidos en Reserva. Sin mencionar que no pudo estar presente el entrenador y la cabeza del equipo, Julio César Falcioni.
- Se muere con el esquema: a pesar de quedarse sin marcadores centrales, el cuerpo técnico improvisó a Lucas Rodríguez como stopper para mantener la línea de 5 con la que viene trabajando. Lejos de dar amplitud por los costados, el Rojo se dedicó más a defender que a proponer y apeló a que le quedara algún contraataque. En el segundo tiempo era claro que había que romper esa línea con un volante más para que ayude al mediocampo y brinde juego, pero Omar Píccoli no lo vio así.
- Solo una situación: es muy difícil pretender ganar un partido generando tan pocas situaciones en el arco rival. Apenas un remate de Silvio Romero desde afuera del área y un mano a mano claro de Jonathan Menéndez en el primer tiempo fueron las únicas opciones que tuvo el Rojo para hacer un gol, sin llegar ni una vez en la segunda etapa, con esporádicos intentos de Alan Velasco. Dependés de una efectividad absoluta que raramente suele suceder.
- Los cambios (o la falta de ellos): como dijimos, Píccoli nunca cambió el ritmo del partido ni la propuesta desde las modificaciones. Apenas hizo tres, todas puesto por puesto, incluso sacando al capitán y goleador del equipo, Silvio Romero, que era de los más claros de la cancha. Además se guardó dos cambios y no le dio la chance de ingresar a revulsivos como Andrés Roa y Braian Martínez.
- El bochornoso penal: si bien desde el juego Independiente pudo haberlo perdido, no podemos obviar que un escandaloso error arbitral le dio el clásico a la Academia. Solo Mauro Vigliano vio infracción de Sergio Barreto sobre Ivan Maggi en el área y en la última jugada del partido. Un accionar inconcebible que le generará una sanción pero que le permitió a Enzo Copetti convertir y darle el triunfo a Racing.