Incoherencias y papelones

0
maldonado-pablo-hugo-moyano

Los hechos que pasaron en los últimos días en el Mundo Independiente demuestran una incoherencia total en los dichos y decisiones de los dirigentes del Rojo.

Esto no es nuevo, es algo que se vio habitualmente durante toda la Gestión Moyano, pero se agravó en los últimos 4 años. Que pisan poco el club y que no están al tanto de muchas de las cosas que pasan en Independiente y en el fútbol argentino ya es vox populi, pero si hacemos un repaso de la última semana nos vamos a poder dar cuenta de por qué el presente institucional y futbolístico de la institución es este.

Todo comenzó por la calentura acumulada en los fallos arbitrales tanto en el partido de Boca como en el de Talleres. Encuentros en los que Independiente tampoco estuvo a la altura dentro de la cancha, a pesar de que lo perjudicaron. Pero mucho se habló de falta de peso dirigencial y, por eso, el día martes en la reunión de AFA, a la rosca política que hay se le sumó Hugo Moyano, presidente del club y uno de los vice de la casa madre del fútbol argentino. Ahí, respaldó fuertemente a Claudio Tapia, su yerno, quien está fuertemente cuestionado por gran parte de los dirigentes, sobre todo los de Primera División. De la calle Viamonte se retiraron conociendo que Mauro Vigliano iba a ser el juez en el Clásico de Avellaneda y la noticia fue celebrada en el seno de la Comisión Directiva.

Tal es así que varios le hacían comentarios a sus allegados o a los medios en off the récord del estilo “este está tocado”, vanagloriándose de que nos iba a favorecer, lo cual estuvo lejos de suceder. Hasta el propio Héctor Maldonado en declaraciones recientes a Ecos del Rojo, expresó: “Cuando nos dijeron que iba Vigliano, nosotros confiamos”.

Arrancó el partido y desde el minuto 5, con la piña de Joaquín Novillo a Jonathan Menéndez que el árbitro se hizo el distraído para no expulsarlo, se dieron cuenta que lo que pensaban no era así. Por eso, incluso previo a la sanción del penal que inventó, desde el sector de allegados y dirigentes en el Cilindro se escuchaban los insultos hacia Vigliano. Y ahora arranca una serie de grande incoherencias y papelones.

Los jugadores calientes, expresan su bronca en los micrófonos y redes sociales, a los cuáles a muchos les hicieron borrar los dichos o retractarse públicamente. Yoyo Maldonado yendo al vestuario del árbitro y, minutos más tarde, quizás más calmado, en los medios habla de que “no hay campaña en contra de Independiente”, cuando a las pocas horas Pablo Moyano, vice del club, despotrica contra Tapia, la AFA y deja en claro una persecución del organismo que su padre y mandamás del Rojo es vicepresidente. En medio de todo esto, Marcelo Tinelli, presidente de la Liga Profesional de Fútbol, toma partido y le envía un mensaje cuasi mafioso directamente apuntado a Hugo, agrandando aún más la figura de un vuelto por los hechos ya mencionados en la reunión del martes.

Después viene la obvia sanción a Vigliano, la bronca e indignación de los hinchas y, como si esto fuera poco, se les ocurrió el mayor acto de falta de dignidad: presentan un documento pidiendo la nulidad del penal y que se le adjudique el empate. Al ver que el hincha se lo tomó para mal y al recibir las cargadas de todo el fútbol argentino, especialmente la del clásico rival, dejan correr que el objetivo es ampliar la sanción al juez del encuentro, algo que se podía pedir tranquilamente por otra vía, sin pasar vergüenza o hacer este tipo de papelones.

DEJA UNA RESPUESTA

Please enter your comment!
Please enter your name here