Mucho se habló sobre los sistemas tácticos de Independiente en la era Julio César Falcioni. Lo cierto es que nunca logró un funcionamiento y generación de juego.
Tanto con línea de 5 como de 4 en el fondo, los problemas son los mismos: errores en el fondo, en pelotas paradas defensivas, poca tenencia de balón, circuitos de pases nulos y escasos tiros al arco.
En el último tiempo se hace muy difícil comprender a qué juega este Independiente de Falcioni. O mejor dicho, qué pretende y a qué aspira. Todas estas falencias nombradas arriba se vienen repitiendo en los últimos partidos. Por poner un ejemplo, con Vélez hubo 1 sólo tiro al arco, y lo mismo ocurrió ante Defensa y Justicia y Atlético Tucumán. Frente a Unión, apenas pateó en 2 oportunidades y en el clásico con Racing, directamente no hubo.
Si vamos a la posesión y circuito de juego, eso Independiente lo regaló, se lo cedió a Vélez (57%), Boca (57%), Talleres (59%), Racing (59%) y Defensa y Justicia (59%). En el ámbito local solo fue superior con Unión (56% a favor) y Atlético Tucumán (52% a favor) y en ninguno de esos encuentros supo que hacer con la pelota en los pies.
El problema no es el sistema, es más profundo, el equipo no sabe salir a ganar.