En el primer encuentro por los cuartos de final de la Copa de la Liga, Independiente venció 4-1 por penales a Estudiantes como visitante tras un empate sin goles en los 90 minutos. Sebastián Sosa atajó dos y metió los cuatro. Pablo Echavarría expulsó mal a Thomás Ortega y condicionó el trámite del partido.
Con Julio Falcioni sentado en el banco y lo mejor en cancha, el Rojo volvió a 1 y 57 después de 16 años en busca de su pasaporte a semifinales. El primer tiempo fue muy chato, con más imprecisiones que llegadas. El Rey de Copas no estuvo fino en los metros finales, abusó del pelotazo y demoró más de la cuenta en varias transiciones. Se volvió previsible y el Pincha lo contuvo bien.
El local intentó con envíos aéreos desde todos lados y forzó errores en la salida de su rival. Tuvo un cabezazo que dio en el travesaño luego de un corner y no mucho más. En tanto que la mejor versión de Independiente se vio sobre el final de la etapa inicial. Primero Mariano Andújar alcanzó a desviar un centro cuando Silvio Romero se disponía a empujarla y luego a Sebastián Palacios le pellizcaron justo la pelota adentro del área.
La monotonía del complemento tardó 15 minutos en romperse. Thomás Ortega vio una amarilla a los 4′ y diez más tarde vio la segunda. Ninguna infracción fue meritoria de amarilla, pero Pablo Echavarría lo echó. Al igual que en Uruguay hace unos días, a remarla de atrás. Estudiantes pasó a ser dueño absoluto del balón, no generó mucho peligro e incluso el Chino Romero, en dos contras, pudo ganarlo.
Sin embargo los 90 minutos se diluyeron y fueron a definir desde los doce pasos. Allí, una actuación soberbia del uruguayo Sosa, quien le atajó a Cauteruccio y Noguera, sumado a las conversiones del Chino, Lucas Rodríguez, Domingo Blanco y Braian Martínez metieron al Rojo en semifinales. Fue triunfo 4-1 con un sabor especial para el DT, que se retiró envuelto en lágrimas por la semana durísima que le tocó atravesar.
El tinte épico de los penales agiganta la esperanza del hincha que sueña con la final. Ahora se viene Colón o Talleres en San Juan y el duelo entre semana ante Bahia. Independiente avanza. Le guste a quien le guste. Con los brazos en alto y las manos limpias, como la historia manda.
