Emiliano Martínez fue el héroe de la jornada. Tapó los primeros dos penales y la Argentina pudo ganarle 4-3 a Países Bajos y clasificar a la semifinal del Mundial.
Sí, el Dibu otra vez tuvo que volver a aparecer. De manera injusta e innecesariamente, Argentina igualó 2-2 y tuvo que definir los cuartos de final desde los doce pasos. Formado en Independiente, de la escuela de Miguel Ángel Santoro, le tocó brillar en la noche de Qatar.
Primero se lo tapó a Virgil van Dijk. Luego, fue a Steven Berghuis. Y la clasificación quedó en el pie de Lautaro Martínez que pudo convertir el suyo.
“Tengo mucha emoción. Jugamos por los 45 millones de argentinos. La gente no está pasando un buen momento por lo económico y darle una alegría es buenísimo”, dijo el arquero. Y cerró: “Ganamos porque tenemos huevos y pasión”.