La derrota de Independiente como local ante Defensa y Justicia dejó varios puntos futbolísticos para analizar.
El déficit ofensivo es una problemática que fue surgiendo en los primeros partidos de Leandro Stillitano y a eso se le suma que, en los dos partidos como local, defensivamente dejó más dudas que certezas.
Los dos goles que concretó el Halcón llegaron por errores individuales y malos posicionamientos. Un córner a favor del Rojo terminó en pérdida de Kevin López en mitad de cancha, encontrando al equipo totalmente mal parado a los 6 minutos de juego.
Instantes más tarde, un pelotazo que parecía controlado por Damián Pérez se complicó y una sucesión de errores derivó en el segundo grito visitante.
Lo preocupante es que, entre Platense en la fecha 2 y Defensa y Justicia el domingo tuvieron 7 ocasiones directas al arco de Rodrigo Rey, y 4 fueron concretadas. Además, en el último partido dio la sensación de que cada vez que se generaba un contraataque iba a terminar en gol.
Lo cierto es que la línea defensiva fue la que más modificaciones sufrió en el armado de la formación. Hasta ahora, en los 4 partidos de la Liga Profesional, Stillitano no pudo repetir los mismos nombres por distintos motivos: la lesión de Luciano Gómez, la expulsión de Patricio Ostachuk, el problema contractual de Sergio Barreto y la rodilla de Edgar Elizalde.
La solidez defensiva debe ser un aspecto a mejorar si Independiente pretende pelear arriba, principalmente para hacer valer la localía en Avellaneda.
