Tras el empate 1-1, Independiente estiró la mala racha como visitante de Gimnasia. En los últimos casi 30 años y en esa condición fue un verdadero dolor de cabeza para el Rey de Copas y lo de ayer no fue un antecedente más.
En las últimas 20 veces que el Rojo fue visitante de Gimnasia La Plata solo pudo llevarse los tres puntos en una oportunidad. Fue en un 2-1 en el Clausura 2011, correspondiente a la fecha 8, con goles de Andrés Silvera y Cristian Pellerano.
En el resto de esa seguidilla de 20 enfrentamientos, el Tripero ganó 15 y empató 4 (la de ayer fue la cuarta igualdad). Y, para colmo, hay otra racha negativa: en todos estos encuentros, el local siempre le marcó al menos un gol al Rojo.
Precisamente esta racha adversa arrancó la noche que Independiente le ahogó el grito de campeón al equipo platense de Carlos Timoteo Griguol. Fue en el recordado 1-0 del Clausura 1995, con el gol de Javier Mazzoni. Ese día comenzó la mala racha en El Bosque.