Continuando con el repaso del año, en el segundo semestre el Rojo disputó la Copa de la Liga, tuvo un cambio de imagen con la llegada de Carlos Tevez como DT, pero se quedó afuera de los playoffs.
Independiente terminó afuera de los puestos de clasificación con 23 puntos, luego de 6 victorias, 5 empates y 3 derrotas. Allí convirtió 15 goles y recibió 11, quedando con una diferencia de +4. Solo le faltó un gol para jugar los 4tos de final. Quedó detrás de Rosario Central, quien salió campeón, y Banfield, ambos con los mismos puntos que Independiente. A 3 unidades del primero del Grupo A, que fue Huracán.
Todo empezó con la dura derrota frente a Colón, con Ricardo Zielinski en el banco. Pero con Tevez el equipo tuvo otro ambiente en el vestuario y dentro de la cancha. Se lo notó más unido y comprometido. Entre los refuerzos estuvo la vuelta del histórico Federico Mancuello y otro punto alto como lo fue Alexis Canelo. También, debutó Javier Ruiz, el joven de 19 años un atrevido y encarador.
En 14 partidos disputados el Rojo mantuvo la valla invicta en la mitad de ellos, 7. Varios encuentros tuvieron como figura a Rodrigo Rey que ya venía teniendo un buen año en cuanto a lo individual. El goleador del equipo en esta parte fue Matías Giménez con 5 tantos, detrás fue Alexis Canelo con 4.
La victoria más importante sin dudas fue ante Racing en el Cilindro por 2 a 0, con los tantos de Canelo y Braian Martínez. Enchufados desde el minuto uno, Tevez planteó el partido de una forma y le salió redondo. La derrota más dura fue la última ante Talleres en Córdoba, un equipo más parecido al de la primera mitad del año, un 3 a 2 en contra que significó la salida temprana del Rey de Copas.
Algo que marcó mucho al Rojo de Tevez fue la mejora en el rendimiento de varios futbolistas, uno de los casos fue el de Joaquín Laso que logró revertir su vínculo con el hincha. Otro que tuvo un cambio positivo y gran rendimiento fue el capitán, Iván Marcone. Uno de los puntos más flojos, por lo que significó su arribo fue Mancuello.