Independiente y Barracas no se sacaron diferencias e igualaron 0 a 0 por la fecha 7 de la Liga Profesional. A continuación, te traemos los principales motivos del empate del equipo de Julio Vaccari.
- Muy flojo primer tiempo: en prácticamente una continuidad de la derrota frente a Instituto, el Rojo tuvo la posesión del balón, pero no fue punzante ni profundo, sin una salida rápida que rompiese líneas. Un mediocampo que careció de movilidad sin pelota para ser opción de pase con Juan Manuel Fedorco y Joaquín Laso, que terminaban la jugada con envíos largos sin un sentido muy claro.
- Mejoró en el complemento: con el cambio de Santiago Hidalgo por Lucas González, el equipo ganó dinamismo y verticalidad en ofensiva, además de un atacante más para presionar alto en la salida del rival, forzando errores tanto en este aspecto como en la recuperación post perdida.
- La entrega: a diferencia de la visita a Córdoba, el Rey de Copas mostró una actitud más parecida a lo que un técnico como Vaccari pide, y si bien falta sumarle a esa entrega una identidad más definida y un orden, se vio cómo David Martínez, Santiago López y Alex Luna desde el arranque, como Hidalgo desde el banco, realizaron un enorme despliegue y esfuerzo.
- La finalización: Aún habiendo generado pocas situaciones claras de gol, fueron reiteradas las ocasiones que, de haberse tomado esa pausa que convierte un ataque prometedor en uno de peligro concreto, se podrían haber generado una mayor cantidad de situaciones manifiestas de gol. Lógicamente esta mejora va de la mano con el proceso de maduración de chicos como López, Hidalgo y Luna, que tienen apenas 18, 19 y 20 años respectivamente.
