Por no haberle abonado su deuda a tiempo, se cayó el acuerdo de pago con Guillermo Burdisso. El club está frente a un nuevo embargo.
En Independiente es una costumbre deber a futbolistas que ya no están en la institución. Inhibiciones y embargos se hicieron moneda corriente en este último tiempo. Ahora se complicó bastante la situación con el defensor que hoy juega en Lanús.
Desde Avellaneda habían arreglado pagar ocho cuotas de 625.000 pesos cada una, pero sólo pagaron dos. Al no haber abonado la tercera, ahora debe pagar todas juntas: es decir, unos 3.750.000 pesos.
Pero eso no es todo. Por La Ley de Contratos de Trabajo se reclaman 3.000.000 de pesos más, correspondientes a gastos e intereses. De esta manera, se solicitó un embargo de 6.750.000 pesos en total. Una suma muy grande, generada por incumplimientos en lo pactado.
Un nuevo problema que la Comisión Directiva deberá afrontar y otro golpe a una economía muy dañada.
