En el empate 2-2 contra Barracas Central, Independiente volvió a jugar mal y no pudo sacar ventaja de la localía.
Sin dudas que el 2022 es un año para el olvido para el Rojo. En cuanto a números, posiciones, objetivos y rendimientos. Y, además, el flojo balance que presenta jugando como local que, en el mayor de los casos, fue superado por equipos de “menor jerarquía”.
Independiente ganó 8 partidos -sobre 25- en la presente Liga Profesional, de los cuales 4 fueron de visitante y 4 de local. La pésima campaña en casa le está costando muy caro y se ve reflejado la posición en la tabla.
Despilfarró varias oportunidades para obtener los 3 puntos en el Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini. Perdió con Platense tras arrancar ganando, con Atlético Tucumán (en Vicente López) por sanciones extra-deportivas, con River sobre la hora y con Central Córdoba por horrores individuales.
A su vez, empató varios encuentros en los que comenzó ganando y, con poco, le arrebataron el triunfo: Huracán, Vélez y Barracas Central. Tampoco pudo doblegar a unos de los planteles más empobrecidos de Rosario Central y que salió 0-0.
Considerando solo los partidos como local (12 PJ) cosechó 16 unidades (4V, 4E y 4D) y se encuentra 21°, dejándolo como uno de los peores equipos del torneo.