Alex Luna fue el único jugador aprobado, el que entendió cómo debía jugarse el Clásico de Avellaneda.
Si se puede rescatar algo positivo de la derrota de Independiente 1-0 frente a Racing es el partido de Luna, el pibe de 19 años que llegó como refuerzo para esta Copa de la Liga.
Arrancó por izquierda, de manera desfachatada, encarando sin miedo y siendo desequilibrante. Tal es así, que recibió un total de 5 faltas e hizo a amonestar a 2 jugadores del rival: Tobías Rubio y Facundo Mura.
Después de un buen primer tiempo, en el complemento se fue apagando, como el resto de sus compañeros. Sin embargo, en 79 minutos en cancha tuvo buenos números. Tocó 46 pelotas con un 67% de pases acertados. Ganó 10 de 12 duelos disputados y tuvo 3 tiros al arco.
Será clave la confianza que le de Carlos Tevez para lo que viene, que lo rodee mejor y el resto se contagie de sus ganas.
Para mí, tanto Luna como Isla calificaron 8. El chileno tiene una jerarquía única.