El mal clima en las tribunas es algo más que cotidiano en la vida de Independiente. El descontento de los hinchas con la dirigencia, las pugnas políticas cada vez más notorias a medida que se acercan las fechas de las elecciones y la urgencia de ganar para no sufrir en el futuro, crean un contexto difícil en el cual también existe una realidad: hay un campeonato que se sigue jugando. Eliminado de las copas y lejos de la pelea por el Apertura, el Rojo sigue su camino silencioso en busca de construir un presente menos crítico.
La muy trabajada victoria ante Godoy Cruz trajo mucho aire a un entrenador que, de a poco, le otorga una identidad de juego a este Independiente tan impredecible como irregular. Las pocas individualidades del plantel mantienen un rendimiento que permite transitar de una forma más liviana una época de muchos problemas, en la cual pocos equipos supieron manejarse bien para salir adelante. La recuperación es el torneo a conquistar.
Está claro que todavía hay errores que corregir, al menos desde lo futbolístico. Cabe preguntarse cuánto puede hacer un director técnico en un plantel que sufrió malas planificaciones desde hace varios meses, aunque oportunamente el “fecha a fecha” de Independiente demuestra una cierta mejoría en relación al pasado. Ante Godoy Cruz, el equipo de Ramón Díaz no brilló ni mucho menos, aunque se rescata la idea de plantear un partido de una forma más ofensiva.
Con esto la intención no es remarcar que el triunfo se haya conseguido específicamente por el planteo táctico, pero está a la vista de todos que la idea de juego está bien definida, y eso ayuda en gran parte a aumentar las chances de ganar. Después podrá discutirse si los jugadores que hay (y sobre todo, los que elige el DT) son los indicados para este momento tan difícil de Independiente…
Todavía hay algo por qué pelear: la recuperación, que es el torneo más difícil de lograr. Quedaron atrás los sueños de éxitos internacionales en 2011, y mucho más los locales, pero todo no se termina ahí. La realidad del Rojo marca que sumar puntos es vital, y el equipo lo está consiguiendo de a poco. Quizás las cosas no salgan tan bien como todos los hinchas quisieran, pero mínimamente se cumple con la parte que al fútbol le corresponde en un ambiente cada vez más complicado.
