Se hunde cada vez más

Por la séptima fecha del Torneo Inicial 2012, Independiente volvió a dejar tres puntos en el camino en su lucha por escaparle a la B Nacional. En cancha de Boca, el Rojo comenzó arriba en el marcador con un gol de Matías Caruzzo en contra, pero Santiago Silva y Juan Sánchez Miño dieron vuelta la historia a favor del local.

Si bien los dirigidos por Américo Gallego mostraron momentos de buen fútbol, la realidad le dio un nuevo golpe al equipo. Aún así, en el primer tiempo se vio lo mejor de Independiente en todo el torneo. A los 2 minutos, el que estuvo cerca del primer gol fue Boca: Sánchez Miño quedó cara a cara con Hilario Navarro y definió por encima del arquero, pero Ferreyra llegó a tiempo y sacó la pelota en la línea.

Pasaba el cuarto de hora en la Bombonera e Independiente crecía cada vez más. Con un gran partido de Battión en el medio y de Ferreyra por la banda izquierda, el Rojo comenzó a generar situaciones claras y comenzó a tomar las riendas del partido. A los 20, Farías perdió un gol increíble: recibió solo por derecha y, ante la pasividad de Ustari, definió con un tiro bajo, muy cerca del segundo palo.

Sólo dos minutos más tarde, llegaría el merecido festejo que hizo olvidar el yerro del Tecla. Ferreyra realizó una gran maniobra sobre la línea de meta, dejó en el camino a Albín y Schiavi y jugó para el medio, la pelota rebotó en Matías Caruzzo y se metió en el arco de Ustari. Pero la alegría duró poco: a los 26, Silva clavó el empate con un soberbio cabezazo tras un centro de Sánchez Miño.

Con la igualdad, el Rojo seguía siendo el dueño del partido y tuvo chances para marcar el segundo. La más clara la tuvo Rosales, quien apareció sin marca en el punto del penal y cabeceó desviado luego de un centro de Ferreyra. Sobre el final del primer tiempo, Boca tuvo el triunfo en los pies de Erviti, pero su remate se fue muy cerca del palo izquierdo de Hilario.

Tras el descanso, el complemento arrancó de la peor manera para Independiente. Al minuto de juego, Fredes perdió una pelota de manera infantil con Sánchez Miño en la mitad de la cancha, el volante se fue solo por izquierda hacia el arco del Rojo y sacó un zurdazo de media distancia al primer palo para convertir el 2-1 ante la floja respuesta de Navarro. Para colmo, a los 8 se retiró lesionado Tula, dejando su lugar a Samuel Cáceres.

Desde entonces, y con todas sus limitaciones a cuestas, Independiente fue como pudo en busca de la igualdad e intentó neutralizar los avances de Boca. El Tolo mandó a la cancha a Vargas y Vidal en lugar de Rosales y Fredes, y si bien el Rojo manejó muy bien la pelota, la historia estuvo lejos de modificarse. A los 26 minutos, Ferreyra no pudo rematar con precisión tras un centro desde la derecha, y a los 41, Vidal se escapó por ese sector y sacó un tiro débil que Ustari contuvo sin problemas.

Con muchas ganas, algo de fútbol y nada de definición, Independiente dejó escapar el partido y Boca se aferró a la victoria. El equipo del Tolo sumó su cuarta derrota en siete partidos, con sólo tres puntos en lo que va del Torneo Inicial, y acumula 14 encuentros sin triunfos. Así, el Rojo sigue en descenso directo y se hunde cada vez más en los promedios, permaneciendo en el último puesto de la tabla.