“El año que viene hay que jugarlo con jugadores hechos”, había declarado Javier Cantero un año atrás, cuando se incorporaron jugadores de experiencia, que mucha gente apoyó, pero que los dirigentes no revisaron de forma correcta su forma física. Cuando empezó la temporada en agosto del 2012, en Rosario ante Newell’s, Independiente formó con: Hilario Navarro; Gabriel Vallés, Cristian Tula, Eduardo Tuzzio, Claudio Morel Rodríguez; Hernán Fredes, Roberto Battión, Víctor Zapata, Paulo Rosales; Luciano Leguizamón y Ernesto Farías.
Un año después, con la situación desbordada por todos lados, Independiente debió definir la categoría ante San Lorenzo. ¿Cuántos jugadores de inferiores había en el equipo titular? La respuesta es ocho. Diego Rodríguez, Julián Velázquez, Lucas Villalba, Hernán Fredes, Fernando Godoy, Juan Manuel Trejo, Francisco Pizzini y Adrián Fernández. Luego ingresaron Leonel Miranda y Eloy Rodríguez.
No son todos iguales los jugadores de experiencia que pasaron por el Rojo esta temporada. Por eso hay que destacar a Cristian Tula, Claudio Morel Rodríguez y Fabián Vargas, que se infiltraron en reiteradas ocasiones para poder estar presentes y hacerse cargo del momento. También a Daniel Montenegro, que jugó 15 de los 18 partidos que van del torneo.
¿Dónde estuvieron Ernesto Farías, Luciano Leguizamón, Jonathan Santana, Roberto Battión y Víctor Zapata durante toda la temporada? Sus pobres niveles, sus constantes conflictos y/o sus reiteradas lesiones, hicieron que en el futuro, se los recuerde como emblemas negativos del descenso del equipo.