Independiente volvió a desaprovechar una chance clara para volver a los puestos de ascenso. En Jujuy, el equipo de Omar De Felippe perdió 1-0 ante Gimnasia y mostró nuevamente un rendimiento flojo. Matías Quiroga anotó el único gol del partido gracias a un error grosero de la defensa del Rojo. Hubo un tanto mal anulado a Martín Zapata.
El primer tiempo pasó sin mucho para destacar, ya que los dos equipos abusaron del pelotazo a los delanteros y no arriesgaron demasiado. Independiente tuvo la chance más clara a los 30 minutos (sí, recién a los 30), cuando un pelotazo de Sergio Ojeda desde mitad de cancha casi termina en un gol de cabeza de Adrián Fernández. Un minuto más tarde, el paraguayo y Facundo Parra quedaron sin marca frente al arquero tras un rebote, pero se molestaron entre sí y no pudieron concretar.
Ya en el complemento, el Rojo salió a jugar con otra actitud. Sin ideas pero con mucha voluntad, intentó arrinconar al local contra su arco. A los 11’ hubo un grosero error del juez de línea, que levantó la bandera y anuló un gol totalmente válido de Zapata tras un gran pase entre líneas de Parra. Siete minutos después, el volante controló la pelota después de un tiro libre de Daniel Montenegro y sacó un remate de volea que terminó en las manos del arquero.
Sin brillar ni mucho menos, los dirigidos por De Felippe eran superiores, pero no encontraban la manera de vencer a Lucas Hoyos. Y lo pagaron caro. Gimnasia, que había ofrecido poco y nada, logró ponerse en ventaja a los 27’ por un error digno del amateurismo: tras un lateral desde la derecha, Ojeda se quedó pidiendo el cambio, Cristian Tula se entretuvo acomodándose las medias y Quiroga aprovechó el desconcierto para cabecear y anotar el 1-0.
Con el resultado a favor, el equipo de Mario Sciacqua cuidó la pelota como pudo y defendió los tres puntos con valentía. ¿Independiente? Totalmente desorientado. De Felippe tardó demasiado en hacer los cambios y no se entiende exactamente qué quiso lograr con esas variantes. Jorge Figal entró por el lesionado Ojeda, Matías Pisano entró por Zapata y Leonel Miranda ingresó por Fredes. Ninguno pudo hacer algo para cambiar la historia.
En fin, la misma historia de siempre. Otra derrota, otra muestra de inmadurez, otra actuación vergonzosa en el Interior del país y otra chance desaprovechada para recuperar el puesto de ascenso. A seis fechas del final del torneo, Independiente no se despierta. El equipo sigue sin responder y sólo lo salvan los resultados ajenos. Hasta ahora, se mantiene a dos puntos de Instituto y Crucero del Norte, los dos equipos que comparten el tercer lugar.