Maximiliano Calzada tenía todo arreglado para convertirse en nuevo jugador de Independiente, pero finalmente la dirigencia del Rojo decidió dar marcha atrás con su contratación.
Ante la ausencia de Jesús Méndez y la falta de certezas sobre su regreso, el volante uruguayo de 24 años iba a llegar desde Nacional para reforzar la mitad de la cancha. De hecho, había pasado con éxito la revisión médica y existía un acuerdo de palabra entre los clubes.
Pese a que el panorama era más que favorable, la operación se cayó a último momento por supuestas referencias negativas que recibieron los dirigentes de Independiente. De esta manera, todos los cañones apuntarían a sumar a Gabriel Graciani, hoy en Estudiantes de La Plata.
