El 2 de agosto es una fecha triste para todo Independiente. Allá por 2004, el mundo rojo quedaba consternado por la muerte de José Omar Pastoriza, el entrenador más importante en la historia del club. LocoXelRojo recuerda al Pato a once años de su paso a la inmortalidad.
Pastoriza dio sus primeros pasos como jugador en Colón de Santa Fe y en Racing. El destino hizo que en 1966 cruzara de vereda para meterse en la historia grande de Independiente, el club de sus amores, donde ganó tres títulos locales (Nacional 1967 y Metropolitanos 1970 y 1971) y uno internacional (Copa Libertadores 1972). Sería un anticipo de lo que vendría en su ciclo como entrenador…
El Pato se hizo cargo del Rojo por primera vez en 1976 para dar comienzo a una etapa más que exitosa. Dio la vuelta olímpica seis veces en total, ganando tres torneos locales (Nacional 1977 y 1978, y Metropolitano 1983) y tres copas (Libertadores 1984, Intercontinental 1984 e Interamericana 1976). Sí, Pastoriza fue el último entrenador que llevó a Independiente a la cima de América y del mundo, y el único que se dio el gusto de ser campeón mientras el máximo rival descendía a la B.
Su último paso por el club fue en el primer semestre de 2004, con una campaña irregular en el Torneo Clausura y la vuelta a la Copa Libertadores después de mucho tiempo. Se esperaba una revancha después del receso de invierno, pero por desgracia, pocos días antes del comienzo del Torneo Apertura, la vida del Pato se apagó el 2 de agosto de ese año a causa de un paro cardíaco. Tenía 62 años.
Su personalidad para comandar un plantel, su pasión por el Rojo, su capacidad como hombre del fútbol y su exitosa trayectoria lo colocaron en un lugar de privilegio en la historia del club. A once años de su fallecimiento, Independiente lo recuerda con respeto, admiración y, sobre todo, agradecimiento.