Pasaron los primeros seis meses del año e Independiente, una vez más, no cumplió sus objetivos. No clasificó a la Copa Libertadores 2017 y tampoco salió campeón de un certamen donde fue el único grande que no jugó el máximo torneo continental. Ahora sólo lo jugará si gana la Copa Argentina o la Sudamericana 2016. Desde la última vuelta olímpica a nivel local ya pasaron 14 años y 24 campeonatos.
El Rojo cosechó 27 unidades en el Torneo 2016, producto de 7 victorias, 6 empates y 3 derrotas. Quedó tercero en la Zona 1 y sexto en la tabla general. En el Libertadores de América sumó 14 de 24 unidades posibles (15° en la tabla acumulada). Como visitante, totalizó 13 de 24 (finalizó 5° de 30 equipos) y fue el que menos perdió en esa condición junto con San Lorenzo, Estudiantes y Lanús.
Otra deuda pendiente fueron los clásicos: no ganó y sólo convirtió un gol. Empató los dos con Racing (1-1 y 0-0), perdió con River en el Monumental (0-1) y con San Lorenzo en Avellaneda (0-1). Sin embargo fue el arco menos vencido de la Zona 1: recibió 12 tantos (5 Diego Rodríguez y 7 Martín Campaña). En total hubo siete vallas invictas: seis del uruguayo y una del Ruso.
Emiliano Rigoni fue el goleador del Rojo en el torneo con 4 tantos y el máximo asistidor (6). Detrás quedaron con tres gritos: Leandro Fernández, quien además le marcó uno a San Telmo por Copa Argentina, Germán Denis y Víctor Cuesta. Tanto el ex Belgrano como Nicolás Tagliafico jugaron los 17 partidos del semestre, pero sólo el defensor completó los 1530 minutos reglamentarios.
En el primer semestre, Mauricio Pellegrino y Fernando Berón usaron 25 jugadores y se produjeron tres debuts: Saúl Nelle (ante Belgrano), Domingo Blanco (contra Vélez) y Gastón Del Castillo (frente a San Lorenzo). En la segunda mitad del año, Gabriel Milito tendrá la misión de clasificar al Rojo a la Libertadores 2017. ¿Cómo? Saliendo campeón de la Copa Argentina o de la Sudamericana. De lo contrario, será otro año más para el olvido.
[poll id=”96″]