Independiente jugó un gran partido en Rosario pero no pudo quebrar a Central. Fue 0-0 en el Gigante de Arroyito. Víctor Cuesta vio la roja y no estará ante San Lorenzo.
Cuesta creer que el equipo de Gabriel Milito no se haya traído los tres puntos. La lesión de Maximiliano Meza a los 3 minutos de juego no le pesó, ya que fue protagonista en gran parte del partido, jugó en campo rival y tuvo las chances más claras, pero le faltó lo más importante: el gol.
El ingreso de Ezequiel Barco por Meza fue una de las claves ofensivas. El juvenil fue desequilibrante y hábil para generar jugadas de pelota parada que sus compañeros no aprovecharon. Diego Vera tuvo la más nítida en el primer tiempo, pero tardó una eternidad en definir. En el arco, Martín Campaña tuvo poco y nada de trabajo.
El Canalla se animó un poco más en el complemento, pero fue el Rojo el que tuvo las riendas del partido, sin poder lastimar. Gabriel Milito jugó todas sus cartas de ataque: sacó al errático Vera y a Jorge Ortiz y mandó a la cancha a Martín Benítez y Germán Denis, dejando como único volante central a Diego Rodríguez.
Si bien Independiente arrinconó al local, el gol nunca llegó, ya sea por la buena tarde del arquero Sebastián Sosa o por no estar fino en la definición. Ni siquiera pudo aprovechar el hombre de más que tuvo con la expulsión de Víctor Salazar, ya que pocos minutos después, Cuesta también vio la roja por doble amonestación.
Al Rojo se le volvieron a escapar dos puntos. Hizo un buen partido en una cancha complicadísima y no le alcanzó. Se valora la notable mejoría en el juego, pero preocupa la falta de gol en la previa de tres clásicos: San Lorenzo, Racing y River.
Hay que poner un delantaro que no lo conozcan Togni o Mesiniti. Blanco debe subir en lugar de Mesa. Rigoni, debe ingresar en el Segundo tiempo.
No le hacen gol ni al arco iris