Independiente jugó uno de los peores clásicos de la historia y Racing lo pasó por arriba de principio a fin. Fue derrota 3-0 en el Cilindro, por el doblete de Lisandro López y un gol de Gustavo Bou.
El Rojo tuvo enfrente a un rival que jugó el Clásico de Avellaneda como una verdadera final y que lo superó ampliamente en los 90 minutos. El equipo de Gabriel Milito no tuvo actitud ni fútbol y corrió atrás de la pelota en todo el partido, ante una Academia que presionaba y las corría todas.
Una defensa desorientada, un mediocampo ahogado y un ataque inexistente fueron las postales de una caída dolorosa y sin atenuantes. Ni siquiera Ezequiel Barco, el único diferente, pudo rebelarse entre tanta mediocridad.
Luego de exigir a Martín Campaña con dos bombazos de Bou y Acuña, Racing pasó al frente a los 23’ con un potente disparo bajo de López, que sorprendió y descolocó al 1 del Rojo. Fue el principio del fin. Poco a poco, Independiente se empezó a quebrar anímicamente. Su única reacción fue un cabezazo de Germán Denis, que tapó bien Agustín Orión.
Se esperaba una respuesta para el complemento, pero la ilusión de darlo vuelta se disipó en apenas dos minutos. Los de Milito entraron dormidos y Racing no perdonó. Jorge Ortiz se enredó en la salida, López se la robó y habilitó a Bou, que definió sin mayor resistencia. 2-0 y chau partido.
Milito intentó cambiar la historia con cambio de esquema y de nombres: línea de tres defensores, con Emiliano Rigoni, Diego Vera y Cristian Rodríguez en lugar de Hernán Pellerano, Martín Benítez y Ortiz. Pero el trámite no varió. Y como si no bastara el error del segundo tanto, a los 18’ hubo una falta infantil de Nicolás Tagliafico adentro del área y Diego Abal no dudó en cobrar el penal que López -cuándo no- cambiaría por gol.
Sin alma, sin juego y sin reacción, el Rojo vio cómo los minutos pasaban y cómo el rival se floreaba. Una derrota totalmente merecida que expuso más que nunca las limitaciones de Independiente en todos los aspectos.
Creo que a los jugadores son culpables, pechos fríos; algunos para equipo chico como Pellerano y Ortiz (no pueden ponerse más la camiseta del Rojo). Pero Milito jugá con el sistema que se te cante el orto, pero pone a los jugadores en su puesto. ya está todo inventado. el cebolla juega por afuera en uruguay y rinde ponelo ahí o dejalo tomar mate en la casa. A laburar, a subir pibes de reserva, total para ver a pellerano y ortiz prefiero un pibe que se haga.
Tristeza total.
Primer gol: regalo de Cuesta. Segundo gol: regalo del Marciano. Tercer gol: regalo de Abal.
Somos unos pelotudos
Cuando se juega tan mal ni siquiera nos deja ver el espantoso arbitraje. Se sabía que Independiente en todos los partidos tuvo un promedio del 70% la pelota, de gusto pero la tenía. La única forma de desarmarlo era cagandolo a patadas, el toque sutil abajo o el empujoncito arriba. Abal se hacía el simpático pero por dos fullcitos, dos amarillas para nosotros, más allá de condicionar a los dos jugadores, fue como un aviso. Del penal, ni hablar, curiosamente nadie habla de ese invento burdo, ni siquiera los periodistas partidarios. Víttor lo pisa en el piso a Denis, delante del árbitro… de todas formas nos pasaron por arriba, por una razón u otra. Hasta ahora no he visto un equipo que jugando 4231 pueda superar a uno con 442, excepto que los dos 5 sean muy, pero muy, buenos. El cambio era Ortiz, ahora, ¿por quién?
LA VERDAD QUE NO VALE LA PENA HACERSE MALA SANGRE POR ESTOS SINVERGUENZA, QUE ENTRAN A LA CANCHA SIN NINGUNA RESPONSABILIDAD ,Y EL PRESI DEL CLUB QUE OPINA DE ESTOS PROFESIONALES QUE TENEMOS QUE LO MENOS QUE TIENEN ES DIGNIDAD
Muy bueno el título: “sin dignidad”. Coincido. Un vergüenza lo de ayer. Eso no es Independiente. Son 11 vestidos con camiseta colorada, pero no son Independiente. Al menos a mí no me representan. Hasta nuestros peores equipos siempre hicieron partido contra Racing. Ponían lo que hay que poner, iban al frente y por lo general ganaban. Lo de ayer fue indigno. Eso al margen del arbitraje que fue un bochorno durante todo el partido y la frutilla del postre fue el penal que inventó
Tengo 58 años y empece a ver fútbol desde el año que debuto Bochini y les juro que nunca vi jugar un clasico al rojo como el domingo y ojo que hubo clásicos que era un desastre y ellos venían en alsa pero le ganábamos o lo empabamos con la camiseta o lo perdíamos por muy poco dejando todo en la cancaha, ni el año que nos fuimos a la B le ganamos es increible lo de esta tarde
Apenas empezó el partido le digo a mi mujer: hoy nos comemos 4. A los 10 minutos teníamos amonestados a los dos laterales por mancha y Racing nos comían los tobillos en toda la cancha y Abal, nada. Tuvimos que esperar una fuerte falta de González a Benítez para ver el primer amonestado de ellos. Del penal ni hablar, una vergüenza. ¿Y por eso perdimos? No, claro que no. Perdimos porque no jugamos a nada. Porque el técnico esta ciego y prioriza más sus ideas que la realidad. Porque Ortiz puede jugar en un 442 (ahí disimula bastante su lentitud) pero nunca en un 4231. Porque los jugadores se apichonaron con el público, con las patadas y con un referí que miraba para otro lado. En diez minutos el partido estaba sentenciado, y si no fuera que ahora tenemos un arquero en serio no comíamos 6. No hay un jugador en el campo que mande, que se pelee con el referí, que sea respetado por el rival. Todos pichones. Y ahora, ¿qué hacemos? Seguimos pretendiendo ser el Barcelona o aprendemos de la aplastante derrota que nos ocasionó Racing y bajamos a la tierra, a la cordura. ¿Quién lo convence a Milito de que él está verde y le falta experiencia para comerce el mundo y encima, que tiene un plantel, que no es peor que el de Estudiantes, Newells, Banfield… pero seguro que no es el Barcelona? Y para pero, ahora River.
Doloroso el caer así, realmente no se que pensar, que te an hecho rojito, sinceramente no sé qué pensar, Hugo hace algo al respecto, no podemos seguir así!
Hoy vi el partido sólo, pero nunca en mi vida sentí tanta vergüenza de ver casi todos estos cagones que se ponen la camiseta más gloriosa del fútbol mundial. A mi hijo de seis años – fanático del ROJO – lo mandaba a jugar para que no viera a estas basuras. No tienen vergüenza. Se arrastraban en la cancha, mientras los otros se mataban en cada pelota y jugaban como si estarían solos. Milito por favor consulta con alguien que sepa algo de fútbol. No podias armar un equipo tan horrible como el de hoy. Ni tu hermano podía podía hacer algo tan horrible. Jamás vi algo parecido. Un equipo hueco, sin actitud, sin velocidad, sin fuerza, sin nada!!! Que verguenza!!! Por Dios!
Sin sangre hijos de puta. Milito no te das cuenta que no sirven ni para putearlos pechos fríos.