Independiente igualó sin goles ante San Lorenzo en una nueva jornada de la Superliga y se aleja cada vez más de la clasificación a la Copa Libertadores del año que viene.
A continuación repasamos los motivos que desembocaron en una pálida imagen que dejó el equipo de Ariel Holan.
- La gran actuación de Campaña: el uruguayo le atajó un penal a Nicolás Blandi en el primer tiempo y se lució con varias intervenciones en la segunda mitad. También supo en qué momento enfriar el partido cuando el rival se venía. Fue la figura.
- La expulsión de Brítez: más allá que en el primer tiempo no había creado situaciones de gol, el hombre de menos condicionó el trámite del encuentro. Independiente no atacó más y se dedicó exclusivamente a mantener su arco en cero.
- El preocupante estado físico de algunos jugadores: Pablo Pérez -al igual que ante Talleres- y Francisco Silva pidieron el cambio por sendas molestias. Pablo Hernández jugó gran parte del segundo tiempo extenuado y Fabricio Bustos se acalambró sobre el final. Si antes era un equipo de 60 minutos, ayer fue, físicamente, uno de 30.
- Nunca generó llegadas claras: lo que en otras oportunidades fue falta de eficacia, ante San Lorenzo fue la falta de ideas para crear situaciones de peligro. En 90 minutos solamente Benítez sacó un disparo de más 30 metros y un tiro libre cerca del área que terminó en la barrera. Tampoco supo defenderse con la pelota, eligió ceder la posesión, el terreno y ni siquiera pudo sacarle provecho a algún contragolpee.