Independiente se metió en los cuartos de final de la Copa Sudamericana 2019. Perdió 3-2 ante Universidad Católica en Quito y avanzó por la regla del gol de visitante. Martín Benítez y Pablo Hernández, los goles de un Rojo que sufrió hasta el final.
Un partido muy incómodo para el equipo de Sebastián Beccacece, que mostró muchas caras diferentes a lo largo del partido. De entrada se le complicó con la lesión de Cecilio Domínguez, quien estuvo apenas 5 minutos en cancha y se resintió de la molestia que tuvo en la semana. Lo reemplazó Fabricio Bustos.
Los ecuatorianos fueron superiores en el comienzo y lograron abrir el marcador a instancias del VAR, que advirtió al árbitro Piero Maza de un supuesto penal de Alan Franco. Bruno Vides lo cambió por gol a los 19′. La serie estaba igualada y el local se animaba más, pero a los 25′ Independiente tuvo un golpe de suerte inesperado a partir de la expulsión de Guillermo De Los Santos.
Ese hombre de más le permitió al Rey de Copas adelantarse unos metros y fue ahí cuando por fin llevó peligro al arco rival, con un zurdazo débil de Benítez de frente al arco y un remate alto de Bustos desde lejos. Beccacece entendió que el trámite estaba para cualquiera y decidió meter mano en el equipo para el segundo tiempo: afuera Francisco Silva, adentro Cristian Chávez.
El complemento empezó con otro susto. Tras una gran corrida por izquierda, Walter Chalá mandó un centro pefercto para Luis Amarilla, quien se perdió el gol abajo del arco. Sólo un susto del cual el Rojo supo recuperarse enseguida, porque a los 4′, Benítez convirtió de cabeza tras un centro de Bustos y, tras varios minutos de esperar la revisión del VAR, el árbitro confirmó el 1-1.
Independiente ganó confianza con el empate y empezó a jugar con el estilo de Beccacece: tenencia, circulación, movilidad y algo de presión, regulando el aire en la altura. Con más comodidad hubo más lucidez y más oportunismo, y fue así como se gestó el 2-1: Chávez aguantó una pelota en ataque y le metió una asistencia perfecta a Hernández, quien definió con clase y tranquilidad a los 26′. La serie, ahora sí, parecía liquidada. Parecía…
Universidad Católica tenía que convertir tres goles en 20 minutos, algo que no se veía muy factible. Sin embargo, a los 34′, un grosero error de Nicolás Domingo en un pase atrás le regaló el 2-2 a Chalá. Un llamado de atención cuando todavía había calma, porque al rival le faltaban dos goles. En los minutos finales, Chávez falló un mano a mano clarísimo que hubiera sentenciado la historia, y ese gol errado se pagó caro en el arco propio: en tiempo de descuento, Amarilla capturó un rebote y estampó el 3-2 que dejaba al local a un tanto de eliminar al Rojo.
Los seis minutos que adicionó el juez chileno fueron para el infarto. Tuvo otra clara Chávez, con un nuevo mano a mano que no pudo definir. En la última jugada, se pararon los corazones en el mundo rojo cuando el árbitro esperó la revisión de un posible penal para la U, pero todo quedó en la nada y el Rey pasó a cuartos.
Objetivo cumplido, con mucho suspenso, con un sufrimiento innecesario y con bastante para corregir de cara a la siguiente instancia, donde Independiente deberá repetir el viaje de esta serie. Se medirá en cuartos de final ante Independiente del Valle, primero en Avellaneda y luego en Ecuador, en este mismo estadio.
A tu mamá vamos a robar para. Garchar deja de joder con los moyanos quien t justa.comparada.Cantero forro cerra el culo y tu mamá q lo abra si si si siiiiiiii
LO QUE FALTABA,
https://www.ole.com.ar/independiente/apuran-rojo-conmebol-sudamericana_0_k9PH9j-0z.html
RENUNCIEN Y DEJEN DE ROBARLE A INDEPENDIENTE PAYASOS
OTRA VEZ NOS PERJUDICARON, ESTUVIMOS A NADA DE QUEDAR AFUERA Y LOS SIMIOS MOYANO COMO SIEMPRE BIEN GRACIAS.
HASTA QUE NO TENGAMOS DIRIGENTES QUE HAGAN ALGO AL RESPECTO NOS VAN A SEGUIR ROBANDO COMO LES DE LA GANA.