Independiente derrotó 3-1 en Bolivia a Guabirá en la primera fecha del Grupo B de la Copa Sudamericana y comenzó con el pie derecho el certamen continental. En LocoXelRojo analizamos las claves del contundente triunfo.
- Diferencia de jerarquías: al Rojo le costó pocos minutos darse cuenta de las limitaciones técnicas de su rival y rápidamente impuso condiciones entendiendo que con una simple sucesión de movimientos y pases o desniveles individuales iban a ganar la mayoría de los duelos y le iban a hacer daño al conjunto boliviano. Abrió el marcador al comienzo y siempre fue en búsqueda de más, sin sufrir abajo.
- El planteo: en Bolivia, Omar Píccoli decidió volver a la línea de 5 defensores y no apostó a controlar la pelota si no que apeló a lastimar desde el contraataque. La disposición táctica funcionó perfecto ante un Guabirá muy abierto y largo entre sus líneas, con pérdidas inocentes de pelota ante la presión. Los delanteros tuvieron mucho lugar para encarar y enfrentar mal parados a los defensores rivales.
- Alan Velasco: la Joya volvió a la titularidad, algo que no sucedía desde febrero contra Lanús y que se pedía constantemente. Lo cierto es que la rompió con su habilidad y su velocidad, siendo el jugador más desequilibrante del equipo. El segundo gol fue toda de él. Venía con bajos rendimientos ingresando desde el banco así que es una gran noticia volver a verlo en este nivel. Le faltó convertir para decorar su noche.
- Jonathan Herrera: el Sultán tuvo un debut como titular soñado. Ya había tenido buenos ingresos en los partidos previos, sumando pocos minutos y generando situaciones contra Talleres en Córdoba, pero se destapó en Bolivia mostrando características claves de un número 9. Optimismo, oportunismo y posicionamiento en el área para capturar dos rebotes y mandarlas a guardar. Otra de las buenas noticias que se trae el Rojo que empieza a encontrar una alternativa viable a Silvio Romero.
- Ganó, gustó y pudo golear: le faltó poco a Independiente para completar la famosa triple G. Malas decisiones en los metros finales le privaron de aumentar aún más el marcador y luego sufrió nuevamente un gol de pelota parada, la única mala noticia que le quedó al Rey de Copas en un importante triunfo como visitante para comenzar liderando su grupo.