Se esperaba que la llegada de Julio Falcioni potenciara a la Joya de Independiente tal y como hizo con Sergio el Kun Agüero en su ciclo anterior, pero lejos estuvo de eso y Alan Velasco tuvo un semestre con poca acción y flojo nivel.
Los números no mienten: en 2021, el delantero jugó 18 encuentros de los cuales en 8 solamente fue titular y anotó solo un gol, de penal ante Bahía en Brasil. El jugador de 18 años comenzó como titular ante Lanús al principio de la Copa de la Liga y luego se ausentó por una lesión y dar positivo de COVID-19.
Desde que volvió, fue sumando minutos sobre todo por el pedido del hincha de verlo en cancha pero sin hacer la diferencia, atolondrado con la pelota, perdiendo pelotas simples que generaban contraataques. Sin dudas es el rebulsivo que tiene Independiente, pero ubicado por las bandas atado a la línea y con responsabilidades en el retroceso defensivo le quitan creatividad a un futbolista desequilibrante.
Su mejor versión se vio en el debut de la Sudamericana ante Guabirá en Bolivia, desparramando a la débil defensa rival una y otra vez. “Trataremos de involucrarlo en un formato de juego donde él se sienta cómodo y acompañado y pueda rendir de la mejor manera”, había asegurado el Emperador en su llegada al Rojo. Será cuestión de trabajarlo para que en el segundo semestre del año se destape y demuestre todo su potencial, si no es vendido ante la constante búsqueda del Brighton de Inglaterra.
